Cómo contribuye el gas natural a rebajar la contaminación en las ciudades españolas
20 Minutos - JUAN FERRARI.
Sedigas, la patronal de las empresas suministradoras de gas natural, junto con su homóloga europea Eurogás, ha iniciado una campaña para resaltar el valor medioambiental de este carburante y el papel que debe jugar para reducir el nivel de contaminación en la mayoría de las grandes ciudades españolas.
A mediados de febrero, la Comisión Europea (CE) advirtió a cinco estados de la UE, España incluido, por el alto nivel de contaminación de sus ciudades -en el caso español, por 3 zonas de calidad del aire, siendo una Madrid y dos que cubren Barcelona-. La CE alerta de un "serio riesgo para la salud" de los ciudadanos, al superar de manera continuada los límites de dióxido de nitrógeno (NO2) en el aire.
De no corregirse, los cinco países -junto a España están Alemania, Francia, el Reino Unido e Italia- se arriesgan a ser denunciados ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Las mismas fuentes de la Comisión recuerdan que, cada año, más de 400.000 personas mueren prematuramente en la UE como resultado de una pobre calidad del aire y "millones más sufren problemas respiratorios y cardiovasculares provocados por la contaminación del aire".
La advertencia de Bruselas se complementa con la recomendación de medidas "para reducir las emisiones contaminantes y, al mismo tiempo, acelerar la transición a una economía hipocarbónica, [...] cabe citar la disminución del volumen global de tráfico, los combustibles utilizados, el cambio a los vehículos eléctricos y/o la adaptación del comportamiento al volante.
En este contexto, la reducción de las emisiones de los vehículos diésel es un paso importante para lograr el cumplimiento de las normas sobre calidad del aire de la UE". El transporte es responsable del 38% de las emisiones de sectores difusos.
En este contexto, Antoni Peris, presidente de Sedigas, ha remarcado el papel del gas natural como energía limpia y su contribución a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero establecidos a nivel europeo en un 40%.
En opinión de Peris, "España podría alcanzar los objetivos de reducción de emisiones poniendo en marcha varias acciones de implantación rápida y bajo coste donde el gas natural es protagonista. La sustitución de combustibles más contaminantes y la generación eléctrica con ciclos combinados son la clave".
El sector del transporte, tanto terrestre como marítimo, es responsable del 38% (2014) de las emisiones de los sectores difusos (menos intensivos en el uso de energía). "La utilización del gas natural en el transporte terrestre y marítimo podría reducir rápidamente hasta un 25% esta cifra", apunta Sedigas, y añade que "cambiar a sistemas modernos de calefacción a gas es una forma rápida y barata de reducir las emisiones del sector residencial hasta en un 55%. Las calderas de condensación presentan hasta un 65% más de eficiencia que sus tecnologías competidoras".
La patronal del gas natural considera que el binomio gas y renovables es una solución de futuro. "Los ciclos combinados [centrales eléctricas que utilizan gas natural] constituyen el mayor garante de estabilidad del sector de generación, dado que aportan firmeza, flexibilidad y una potencia ya instalada. A su vez, es una tecnología limpia, puesto que aumentar la generación a gas disminuiría las emisiones hasta en un 66%".
Pérdida de peso en la producción de electricidad
Sin embargo, la realidad es que el gas natural ha perdido mucho peso en el conjunto de energías destinadas a generar electricidad. En 2007 contribuyó al 21,6% del total de la generación, y las renovables, el 6,8%. El pasado año se redujo al 16%, frente al 28% de las renovables.
Unos porcentajes que están muy marcados por las condiciones climáticas. Si es un año de mucha agua, la energía hidráulica gana peso, lo mismo pasa si hay mucho viento con la eólica. Como muestra, en mayo, el gas se redujo al 8% de la generación de electricidad, mientras que la conjunción de eólica-solar se quedó con el 40%.
A pesar del clima, el gas no es lo que era en la generación eléctrica. Según Enagás, la empresa encargada de la infraestructura que asegura el suministro de gas natural en España, en 2008 las centrales de ciclo combinado consumieron 187 TWh; en 2015 se limitó a 61 TWh y el pasado año se redujo algo, hasta los 60 TWh.
Si es un año de mucha agua, la energía hidráulica gana peso Aunque el aumento de las renovables es responsable de este descenso, los defensores del gas natural no comprenden por qué las centrales térmicas alimentadas con carbón, mucho más contaminantes que el gas natural, mantienen un peso del 25% en la generación eléctrica. Es, en este sentido, que Sedigas considera que el gas natural debe jugar un mayor papel en la electricidad.
Respecto al aire urbano, la patronal ha presentado un informe que analiza el impacto de la sustitución de automóviles de gasolina y diésel por otros de gas natural licuado (GNL) y comprimido (GNC), así como la sustitución de las calderas de carbón y diésel por otras de gas natural.
Respecto al parque automovilístico, el informe analiza el impacto sobre cinco gases nocivos para la salud y el medio ambiente, además de partículas en suspensión. Concluye que tan solo "sustituyendo el 5% del parque de vehículos pesados y turismos de gasolina y diésel por un parque de gas natural en Madrid y Barcelona reduciría las emisiones de todos los gases contaminantes (excepto C0) entre un 1,5 y un 5%". El valor de los coches de gas queda patente en que el Gobierno los incluye en el plan Movea de ayudas a la compra de coches ecológicamente eficientes.
Respecto a las calderas, el informe de Sedigas dice: "La sustitución de todas las calderas de carbón y del 20% de las calderas de GLP (gas licuado del petróleo) y gasóleo C por calderas de gas natural en las ciudades españolas reduciría de forma significativa las emisiones de PM y SO2".
12.000 km de gasoductos
Enagás es el principal transportista de gas natural y el Gestor Técnico del Sistema Gasista en España, donde cuenta con cerca de 12.000 km de gasoductos, tres almacenamientos subterráneos en Serrablo (Huesca), Gaviota (Vizcaya) y Yela (Guadalajara).
También tiene cuatro plantas de regasificación: Barcelona, Huelva, Cartagena y Gijón. Además, es propietaria del 50% de la planta de regasificación de Bilbao y del 72,5% de la de Sagunto.
Fuente: 20 Minutos
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